Para empezar con este blog os voy a dar una receta con la que empece a disfrutar en este apasionado mundo que es la repostería acompañado de mi hija Jone.
Todas las recetas que iré subiendo son sencillas, lo único que hay que hacer es medir bien los ingredientes, seguir bien los pasos y ante todo tener mucha paciencia y poca prisa.
Ingredientes:
- 2 huevos
- 400 gr de harina
- 100 gr de azúcar
- 1 sobre de levadura royal
- 80 ml de leche
- 80 ml de aceite de oliva
- 1 o 2 cucharaditas de anís
- ralladura de un limón
Elaboración:
En un bol se mezclan los huevos y el azúcar hasta que estén bien unidos. A continuación,se le añade a la mezcla la leche, el aceite, el anís y la ralladura del limón.
Aprovechando que a los niños les gusta tamizar, lo hacemos con la harina y la levadura e iremos agregando poco a poco y cuando vaya cogiendo cuerpo se saca del recipiente y se trabaja sobre la encimera previamente impregnada de aceite para que la masa no se pegue.
Trabajamos hasta que la masa quede compacta, pero blanda a la vez.
Se deja reposar la masa tapada durante una media hora en el frigorífico.
Ahora es cuando nos ponemos todos manos a la obra y hacemos la forma de las rosquillas de la manera que nos resulte más cómoda y divertida.
Freímos a las rosquillas a temperatura media alta en abundante aceite con cuidado de que no se quemen y al sacarlas ponemos encima de un papel de cocina para quitar el aceite sobrante y las dejamos enfriar, que para mi gusto así están mas ricas.
En algunos casos, se les suele bañar en azúcar, pero a mi entender ya están lo suficientemente dulces y no necesitan más.
Esperando que os salgan tan ricas como a mi, me despido hasta la proxima receta.
On egin!!!
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